fuente. El Andaluz
Alrededor de tres meses la Asamblea Legislativa Departamental de Tarija (ALDT) atravesó por una crisis institucional con la paralización de varias de sus actividades.
La falta de consensos para elegir a la nueva directiva y posteriormente para resolver la acefalía en la presidencia del ente legislativo generó una crisis que afectó el trabajo legislativo.
El segundo vicepresidente de la directiva de la Asamblea Departamental, Rubén Reyes indicó que una de las razones de los conflictos internos en el ente legislativo fueron las imprecisiones que tiene el reglamento.
Mención que el reglamento de la Cámara de Diputados habría sido adecuado para la Asamblea Departamental, pero no se realizaron los ajustes de redacción requeridas.
Reyes dijo que se necesita un reglamento que esta de acorde a la realidad plena del procedimiento que se aplica en la Asamblea Departamental de Tarija.
Varios asambleístas durante el conflicto interno señalaron que se tienen algunos vacíos en el reglamento que requieren de un ajuste.
Recordó que a inició de la gestión anterior se planteó como bancada la reformulación del reglamento, pero no se contó con el apoyo necesario, puesto que se requiere de dos tercios para realizar modificaciones al reglamento.
Ahora nuevamente se volvió a plantear la reformulación del reglamento y se remitió a la comisión de Constitución para su tratamiento.
El segundo vicepresidente informó que desde la comisión ya se realizaron las notificaciones a cada una de las bancadas para que se puedan hacer las sugerencias para modificar el reglamento, para incluir, modificar o suprimir algunos aspectos del documento.
Estas sugerencias deben hacerse llegar hasta finalizar este año y esperan que al retorno del receso de fin de año se pueda tratar el tema en el pleno para consolidar los ajustes necesarios al reglamento.
Son varios los aspectos que requieren ajustes, entre ellos, qué se debe hacer en caso de ausencia del presidente de la Asamblea Departamental, por renuncia u otra situación y cómo se elige a un nuevo presidente, un aspecto que generó conflictos internos en meses pasados.
Remarcó que este tema generó mucha polémica al interior del ente legislativo y debe ser ajustado para que no se generé nuevamente un vacío de poder en la representación.
Recordó que la polémica en los meses de mayo, junio y parte de julio, fue por quién debería convocar a los legisladores, puesto que en varias ocasiones no se pudo instalar una sesión del pleno de la Asamblea por ese aspecto.
Se sugirió que lo hagan los asambleístas más antiguos, pero la propuesta no fue bien recibida por todas las bancadas y también se tenía algunas observaciones a que lo puedan realizar los jefes de bancada, lo que generó una crisis institucional.
Considera que como este tema y otros deben estar bien definidos en el reglamento, con precisión para que no se deje a libre interpretación de algunas personas.
Reiteró que son muchos los aspectos que requieren de ajustes en el reglamento de la Asamblea Departamental, modificarse, incluir o suprimir en el documento.
Representación del pueblo Weenhayek
Por otra parte, Reyes recordó que el pueblo Weenhayek, decidió cambiar la representación ante la Asamblea Departamental y eligieron a una nueva asambleísta departamental que cumple con funciones como legisladora, pero no cuentan con un asambleísta suplente.
El legislador departamental, explicó que es un tema que se debe resolver en la nación indígena, que ellos deben acreditar a un representante para que cumpla la función de asambleísta suplente, mientras tanto solo cuentan con una asambleísta titular.
“La asambleísta que ahora representa al pueblo Weenhayek no tiene suplencia”, expresó.
Señaló que cuando la asambleísta tiene alguna dificultad o solicita licencia por algún impedimento se tiene carencia de representación del pueblo Weenhayek.
No se tiene una persona que la supla en la semana de alternancia y en algunas oportunidades la legisladora titular tiene algún impedimento y el pueblo Weenhayek se queda sin representación en la Asamblea Departamental.